Con el paso de los años, los dientes van perdiendo su color natural, y tienen un aspecto más oscuro que resulta antiestético. Por eso, a muchas personas les gusta cuidar su sonrisa y recurrir al blanqueamiento dental de la mano de expertos. En una clínica dental Barcelona su equipo de odontólogos nos puede asesorar sobre los distintos tipos de tratamientos de blanqueamiento dental, en qué consisten y cómo cuidar nuestra dentadura después del tratamiento.

Cuidar nuestros dientes es cuidar nuestra salud

Un blanqueamiento dental es un tratamiento que elimina manchas en los dientes, que van apareciendo por diferentes causas y dan aspecto antiestético a nuestra dentadura.

Existen dos tipos de blanqueamiento esenciales: el no vital, que se hace si el diente ha sido sometido a una endodoncia y no tiene nervio; y el vital, que es el tratamiento más común, para dientes que están vitales y tienen nervio. En este caso, se utiliza un gel que se aplicará directamente a la superficie del diente, y que tiene peróxido de hidrógeno o de carbamida.

Los tratamientos blanqueadores se pueden realizar en la consulta, o también pueden ser ambulatorios. Si el odontólogo considera que es mejor hacerlo en la consulta, el gel que se utilizará es más potente. Utilizará también un láser que activa el gel y permite que éste actúe más rápido y en más profundidad. Para realizar este blanqueamiento, se necesitarán entre una y tres citas, y cada una durará entre 30 y 90 minutos, dependiendo de las manchas en los dientes.

El tratamiento en casa, una vez realizada la revisión en consulta, consiste en la colocación de unas férulas a medida de nuestra dentadura, para que el agente blanqueador penetre con eficacia en los dientes. El gel se coloca en la parte interior de la férula, y ésta se llevará puesta durante varias horas al día, siempre de acuerdo con lo que prescriba nuestro dentista.

Cuidados posteriores al blanqueamiento dental

Lo más probable es que después de las sesiones de blanqueamiento dental, nuestro odontólogo nos recomiende hacer lo que se conoce como “dieta blanca”, que consiste en evitar alimentos y bebidas con muchos pigmentos o colorantes (frutos rojos, café, salsas, vino tinto), para evitar mancharnos la dentadura en el mes posterior nuestro tratamiento.