La triología de libros de Cincuenta sombras de Grey se ha convertido en todo un fenómeno de masas que han movilizado principalmente al sector femenino.

La escritora  E. L. James nos ha deleitado con una triología compuesta por los siguientes títulos: Cincuenta sombras de Grey, Cincuenta sombras más oscuras y Cincuenta sombras liberadas.

La historia narra relación entre una recién graduada y Christian Grey, un joven y apuesto magnate de los negocios. A lo largo de las páginas podemos leer ciertas escenas eróticas donde se vislumbran situaciones relacionadas con la dominación, la sumisión, el masoquismo, el sadismo… Pero a su vez, podremos profundizar en la personalidad de los personajes, y ahondar en su pasado para poder comprender su presente.

Se han vendido 31 millones de copias a nivel mundial y los derechos han sido vendidos en 37 países diferentes.

Las novelas han tenido críticas encontradas, por un lado hay lectores que defienden la historia y el contenido a “capa y espada” y por otro encontramos críticas más negativas hacia la historia que nos cuenta los libros.

Tras la aparición de las novelas, la historia ha sido llevada al cine. Por supuesto, el salto de la historia a la gran pantalla no ha dejado indiferente a la sociedad, y de nuevo nos encontramos ante multitud de opiniones encontradas sobre el contenido del film.

Muchos expertos afirman que la lectura de esta novela ha despertado el interés sexual de muchas personas que han leído sus páginas, provocando que el apetito sexual en la pareja aumente. Pero debemos ser conscientes de que es una historia ficticia, y por tanto no podemos compararla con la realidad que nos acompaña a las “personas de carne y hueso”.

Posiblemente muchos maridos o esposas estén felices de que su pareja haya descubierto este tipo de lectura/cine, ¡o quizás no! Lo que si debemos tener claro es que las relaciones de pareja dejan espacio a todo tipo de prácticas, pero siempre bajo el consentimiento de las partes, y siendo consensuado entre los implicados.