En algunas ocasiones, la lubricación femenina puede verse afectada por diferentes factores externos, muchos de ellos de fácil control. Algunos de los factores que pueden ser causantes de ello son la ausencia de una dieta saludable, tener alguna clase de problema de hidratación corporal o sencillamente la ausencia de deseo sexual, aunque puede haber otras causas más que vamos a enumerar en este artículo.

Causas de la falta de lubricación vaginal

Una baja producción de estrógenos puede ser la responsable de la falta de lubricación. Los estrógenos tienen una gran importancia debido a que durante la excitación, la glándulas bartolinas ubicadas en la entrada de la vagina comienzan a segregar flujo para poder mantener relaciones sexuales placenteras.

La ausencia de esta hormona natural hace que no se tenga una suficiente lubricación en la zona y es entonces cuando pueden llegar a aparecer problemas a la hora de mantener relaciones sexuales, pudiendo hacerlas bastante dolorosas, para lo que hay que utilizar cremas lubricantes.

Estar bajo un tratamiento médico puede ser otra de las causas porque hay algunos medicamentos como pueden ser los benzodiacepinas que pueden provocar alguna clase de desajuste hormonal, desembocando en un problema de sequedad vaginal leve o severa.

Por ello es recomendable seguir al pie de la letra las dosis recomendadas por los médicos y poder llevar un control total sobre la cantidad y hora de toma de estos medicamentos. Así conseguiremos evitar contraindicaciones que puedan hacer que las relaciones sexuales dejen de proporcionar placer.

Otra posible causa es que el cuerpo no cuente con la hidratación que necesita, algo bastante común en relación a la sequedad vaginal. Para ahorrar agua, el cuerpo manda una señal para que no se produzca la lubricación. De esta forma se retienen los niveles de hidratación mínimos necesarios para la vida.

No hay que olvidarse que tras realizar una sesión intensiva de ejercicio físico o después de beber alcohol (que deshidrata muchísimo), hay que beber mucha agua, con lo que restablecer rápidamente unos correctos niveles de hidratación.

¿Cómo solucionar el problema de la sequedad vaginal?

Los expertos nos recomiendan sobre todo llevar una dieta sana y variada, dando especial protagonismo a las verduras y a las frutas, procurar evitar comer productos industriales, grasas, fritos, etc. Si se van a tomar medicamentos, siempre hay que leer las interacciones que puede provocar su ingesta con otros fármacos y asegurarnos de que no existan contraindicaciones, algo en lo que nuestro médico puede ayudarnos.

Por otro lado debemos prestar especial atención a nuestro cuidado íntimo porque así podremos evitar no solo estos sino otros problemas vaginales. Se recomienda visitar de manera periódica el ginecólogo, el uso del método anticonceptivo menos agresivo y sobre todo llevar a rajatabla la higiene y tener disciplina en todos los cuidados de esta zona.

En caso de que siguiendo estas indicaciones continúes teniendo problemas de lubricación, lo mejor que puedes hacer es consultar con tu médico o con tu ginecólogo porque puede haber otro componente que no hayamos tenido en cuenta y el problema se solucione rápidamente.