Con el paso de los años nos damos cuenta de que nuestro tejido facial se va debilitando y por lo tanto es necesario recurrir a cremas o tratamientos que frenen este deterioro para sentirnos más jóvenes y tener constantemente una buena imagen.

La armonización facial es la solución

El problema es que no siempre los tratamientos convencionales dan los resultados esperados y al probar unos y otros siempre perdemos nuestro dinero y lo peor de todo es que se nos va lo único que nunca podremos recuperar: “El tiempo”.

Está claro que lo mejor es hacer uso de técnicas de armonización facial como las que lleva a cabo la Dra. Carvalho. Aplicar estas técnicas desde que la piel es joven y firme, es fundamental para evitar tener que recurrir, a la larga, a opciones quirúrgicas que cambien ligeramente o por completo las facciones de nuestro rostro.

Pero no siempre nos damos cuenta de que la piel ha entrado en un proceso de deterioro y en ese momento es cuando resulta más complicado que los tratamientos sean totalmente efectivos.

De ahí que constantemente nos veamos obligados en avanzar en terreno estético, investigando en tratamientos innovadores que muestran resultados precisos para todos los casos.

Es aquí donde se introduce el papel de la Doctora Carvalho que ha desarrollado una técnica pionera no invasiva, basada en la armonización facial, apelada con el nombre de Mesoprotocol®.

Mesoprotocol®, tal y como podemos intuir de su nombre, se basa en los fundamentos de la mesoterapia pero se apoya en protocolos únicos que se han diseñado específicamente para garantizar una máxima eficacia de esta técnica.

Para llevar a cabo el tratamiento de Mesoprotocol®, también se hace uso de una aparatología y una maquinaria que ayudan a conseguir los resultados buscados.

¿Pero cuáles son esos resultados? Pues bien, Mesoprotocol® promueve la renovación y reparación celular de la forma más natural posible. Además, consigue resolver problemas que hasta ahora han sido difíciles de tratar con los métodos que existen a día de hoy. Algunos de estos problemas son: melasma, flacidez facial, manchas, poros dilatados, arrugas estáticas y dinámicas o cicatrices muy marcadas.

Mesoprotocol® busca suavizar y corregir estas imperfecciones dermatológicas con una técnica que estimula la producción de colágeno de la piel y consigue activar los fibroblastos (células responsables de la formación y remodelación del tejido). Gracias a esta metodología de estímulos biológicos a través de activos, aumenta la respuesta de renovación a nivel celular, lo que permite ver resultados inmediatos.

Esto es sin duda lo que más nos gusta de Mesoprotocol®, al contrario de otros tratamientos, con esta técnica se obtienen resultados visibles y duraderos desde las primeras sesiones.

Sin duda Mesoprotocol®, ha supuesto un cambio imprescindible en los tratamientos de armonización facial presentes hasta la fecha.

Además, no podemos olvidarnos de mencionar que una de sus mayores ventajas es que trata el problema a nivel celular, por lo que la imagen del paciente no se ve alterada, ni aporta relleno, ni volumen. Los cambios son sutiles, naturales, pero totalmente efectivos.