Si hablamos de cómo hacerle el amor a un hombre, podemos ser de lo más simples, algo que todas conocemos, pero si se quiere una relación muy satisfactoria para ambos, hay que seguir una serie de pautas. Ya se sabe que en el amor y en el sexo no está todo escrito y que todas las personas responden de diferentes maneras, pero seguro que con los consejos que os vamos a dar, sorprenderéis a vuestro chico en la cama (o donde queráis).
Consejos para hacerle el amor a un hombre
Para hacer bien el amor y enamorar a un hombre en la cama no hay que ir directas, no podemos olvidarnos de los juegos previos. Las caricias por su cuerpo son algo que les gusta; pecho, nuca, espalda, etc. Si hay confianza, pasar las manos por su trasero o sus partes íntimas será algo que también le guste mucho.
A ello hay que acompañarlo con besos, sobre todo por el cuello y la zona de las orejas, son zonas erógenas muy placenteras para ellos (también para nosotras) Si queremos subir la temperatura podemos desnudarnos lentamente, con movimientos sensuales.
Una vez desnuda o en braguita y sujetador, puedes comenzar a quitarle tú la ropa a él mientras sigues acariciándole y besándole. La ropa quítasela poco a poco, procurando rozar tu cuerpo con el de él, siempre con pausa, así aumentarás su excitación y deseo hacia ti.
En tu mano está seguir jugando, pero es un buen momento para practicarle sexo oral, algo que por norma general gusta mucho a todos los hombres. Puedes usar todas las técnicas que conozcas, pero sin olvidarte de utilizar también las manos para aumentar su placer o incluso también para estimularte tú también, no solo va a pasarlo él bien.
Él puede hacer lo mismo contigo, por lo que puedes ponerte en una posición que le invite a hacerlo y tú también puedas disfrutar del momento, dejándote llevar por la excitación. Recuerda, que todos estos pasos son muy importantes, el juego y los preliminares no solo os preparan a ambos sino que aumentan el deseo sexual.
La penetración, otro aspecto de importancia
El siguiente paso es uno de los más excitantes para ambos, la penetración. En este paso tu puedes ser quien lleve las riendas poniéndote encima y llevando tú el ritmo. Además podrás moverte en círculos y aplicar la presión o velocidad que estimes. Por otro lado también podrás dejar que sea él el que se ponga encima o en cualquier otra postura para darte y darse placer.
La penetración, aunque no siempre es obligatoria, es otro aspecto más a tener en cuenta. De ti depende las posturas o clases de penetración que quieras que tu chico te haga. En tu imaginación están tus límites.
Para finalizar, hay detalles que deberías tener en cuenta, como por ejemplo dejar la luz encendida para disfrutar también con la vista o con media luz para que la sensualidad y sexualidad se apodere de la imaginación del momento.
¿Alguna vez has probado a hacerlo así?