Los tacones altos son la gran debilidad de muchas mujeres. Además de estilizar nuestro cuerpo, los tacones suelen dotar de elegancia a cualquier conjunto y hacen que una mujer se sienta más femenina y cómoda consigo misma.

No obstante, muchas veces estas ventajas quedan anuladas por una razón sumamente importante: el sufrimiento y dolor que muchas veces padecemos al llevar este tipo de calzado.

Hay muchas mujeres que optan en esos casos por zapatos planos que revisten una mayor comodidad y actualmente se encuentran muy de moda pero, ¿que pueden hacer las fieles de los tacones para vestirlos sin tener que sufrir de manera constante con ellos? A continuación os dejamos una serie de consejos para conseguir que los tacones se vuelvan en vuestro mejor aliado y no en vuestro enemigo.

  • Elige unos tacones cómodos y que se adapten a tu pie: lo primero que debemos tener en cuenta es que, dentro de que los tacones no faciliten que nuestro pie se sienta cómodo, la realidad es que existen algunos zapatos que nos resultan más incómodos que otros. Precisamente por ello lo más importante es elegir un buen calzado que se adapte a nuestro pie y que nos permita movernos de manera adecuada. No optéis siempre por lo barato ya que no tiene porque ser la mejor opción.
  • Las almohadillas pueden ser una buena alternativa: Existen múltiples alternativas en el mercado para nuestros pies. Las almohadillas y otra serie de accesorios pueden ser una opción útil para reducir en gran medida el dolor de manera que podemos incluirlas en nuestro cajón para usarlas en aquel calzado que nos resulte más incómodo.
  • Ante los zapatos abiertos, cinta de doble cara: muchas veces elegimos la talla incorrecta a la hora de elegir zapatos u optamos por unos zapatos abiertos. En estos casos lo que suele ocurrir es que el zapato se nos mueve y terminamos pareciendo un «pato mareado», con el consecuente riesgo que conlleva y que puede ser caernos en el momento menos pensado.
    Una alternativa que utilizan algunas famosas es optar por usar cinta de doble cara y así mantener el calzado fijo a sus pies.
  • Utiliza sprays «antifricción»: además de las almohadillas que hemos citado antes también existen los sprays antifricción, los cuales evitan que el calzado nos pueda producir rozaduras y heridas en los pies.
  • Sumate a la moda de las plataformas: finalmente, otra de las alternativas más cómodas y recurrentes de los últimos tiempos es el uso de zapatos con plataforma. De esta manera podemos optar por usar zapatos de tacón altos pero reducir el tacón unos centímetros gracias a la plataforma que llevan delante y que nos facilitará movernos con los mismos.

Además de todo este tipo de alternativas debemos decir que existen opciones más «drásticas» que conllevan la realización de cirugía en los talones inyectando una sustancia que haga que el mismo soporte mejor el peso. No obstante, si sois de las que preferís optar por los métodos más clásicos podéis probar todos los trucos que os hemos indicado arriba y contarnos el resultado.