Si eres de las que les gusta celebrar Halloween estás en el mejor momento para preparar tu hogar para la fiesta más terrorífica del año. Lo mejor de todo es que no habrá que gastar demasiado dinero y podrás conseguir una formidable decoración con la que sorprender a tus hijos o a cualquier persona que invites a la fiesta.
Consejos para decorar para una fiesta de Halloween
Todo el mundo tiene algodón en casa y es uno de nuestros grandes aliados. Deshilando mucho el algodón conseguiremos preparar telas de araña que podrán ponerse en cualquier mueble o esquina del hogar. Si tienes hijos pueden ayudarte y de esta forma podéis preparar una divertida actividad para hacer en familia decorando la casa para este evento tan especial.
Otro elemento que no puede faltar es una calabaza, la cual hay que cortar por la parte de arriba, vaciar por completo y hacerle unos ojos y una boca, colocarle una vela en el interior y ya estará lista para asustar a todo el mundo.
La pulpa no hay que tirarla porque se puede utilizar para hacer un pastel o un relleno y si quieres aprovecharlo todo, puedes poner las pipas sobre un papel de periódico, echarles sal y dejar que se sequen, después podrás comértelas.
Si no te gustan las calabazas o no quieres trabajar tanto en un objeto para decorar esta fiesta, tienes otra opción más fácil. Puedes comprar globos de color naranja, inflarlos bien y después, con un rotulador permanente pintar boca y ojos. Lo mismo puedes hacer con globos blancos, simulando fantasmas, etc.
Fantasmas y murciélagos, indispensables en Halloween
Con cartulinas de color negro y blanco se pueden hacer pequeños fantasmas y murciélagos, tan solo hay que utilizar una plantilla y recortar. Después hay que atravesar la parte superior con una cuerda y tendremos unas guirnaldas terroríficamente divertidas.
Si vas a tener invitados para cenar, puedes decorar la mesa, pero sin recargarla demasiado, aunque sin perder la esencia de este día. Y ya si tienes unos candelabros, seguro que sorprendes a todos los invitados. Puedes acompañar la decoración con servilletas negras y un mantel naranja, por ejemplo.
Para esa cena puedes comprar algunos vasos de color negro en alguna tienda de decoración low cost y pintar el exterior con un rotulador permanente blanco o plateado. Puedes poner algún mensaje o dibujar algún monstruo, tela de araña o algo relacionado.
Si va a haber niños, nunca está de más preparar una zona con dulces específicos que se pueden comprar para la ocasión. También es recomendable preparar algunos juegos o incluso alguna película o serie, como las de Scooby Doo por ejemplo.
Como ves, la decoración puede ser tan sencilla como tú quieras, el único límite es tu imaginación así que… ¿por qué no te pones manos a la obra y sorprendes a los tuyos?