El amaranto es un cereal sin gluten, rico en proteínas, fibra y vitaminas que también puede ayudar a reducir el colesterol y es rico en proteínas de buena calidad, calcio y zinc que no sólo ayuda al cuerpo a aumentar la eficiencia de la recuperación del tejido muscular y su volumen, sino que también ayuda a preservar la masa ósea debido a su alto contenido de calcio.

Dos cucharadas de amaranto tienen 2 g de fibra y un adulto necesita unos 20 g de fibra al día, así que sólo 10 cucharadas de amaranto son suficientes para cubrir las necesidades diarias. Otros beneficios del amaranto son

  • Fortalecer el sistema inmunológico, ya que es rico en antioxidantes que son sustancias que fortalecen las células del sistema inmunológico.
  • Combatir el cáncer, debido a la presencia del antioxidante escualeno que disminuye el flujo de sangre a los tumores.
  • Ayuda en la recuperación muscular, porque tiene una buena cantidad de proteínas.
  • Combatir la osteoporosis, por ser una fuente de calcio.
  • Ayuda en la pérdida de peso, porque es rico en fibra, afloja el intestino y sacia el hambre.

Además de todos estos beneficios, el amaranto también está especialmente indicado en los celíacos porque no contiene gluten.

Hay amaranto en los copos, la harina o las semillas, normalmente la harina se utiliza para hacer pasteles o panqueques y los copos y las semillas en la granola o el muesli para añadirlos a la leche o el yogur y así hacer un desayuno más nutritivo y saludable.

El amaranto puede conservarse en nuestra nevera durante 6 meses, siempre que esté en un recipiente bien cerrado para evitar la entrada de humedad.

Cómo consumir el amaranto

El amaranto puede añadirse a los alimentos de diversas maneras, como vitaminas, en ensaladas de frutas, yogures, en forma de harina sustituyendo a la harina de trigo pasteles y tortas, por ejemplo. El amarianto se puede encontrar en las tiendas de productos naturales o en los supermercados (también podéis comprarlo aquí) y es un excelente sustituto del arroz, así como de la quinoa.

Los copos de amaranto son nutricionalmente más ricos que cualquier otro cereal como el arroz, el maíz, el trigo o el centeno y pueden ser un excelente suplemento para añadir a las recetas.

Recetas con Amaranto

A continuación, os dejamos unas recetas con amaranto que podéis preparar:

Pastel de amaranto con quinoa

Ingredientes:

  • Media taza de quinoa en granos
  • 1 taza de copos de amaranto
  • 1 huevo
  • 4 cucharadas de aceite
  • 1 cebolla picada
  • 1 tomate picado
  • La pasta formada al machacar una zanahoria cocida
  • 1 taza de brócoli hervido y picado
  • 1/4 taza de leche desnatada
  • 1 cucharada de levadura
  • Sal al gusto

Modo de preparación:

En un tazón, mezclar todos los ingredientes. Distribuye el contenido del tazón en un molde y hornea en un horno precalentado durante 30 minutos o hasta que se dore a 180 grados.
Recuerda que los granos de quinua y los copos de amaranto se pueden encontrar en las tiendas de productos naturales o en los supermercados.

Gelatina con amaranto

Ingredientes

  • 50 g de copos de amaranto
  • 1 taza de gelatina o 300 ml de zumo de fruta

Modo de preparación:

Sólo hay que añadir al zumo de fruto a a la gelatina el amaranto. Es ideal para consumir después de realizar ejercicios de entrenamiento, además de ser muy nutritivo.